El presidente Mauricio Macri ingresó esta tarde, a las 19:20, a la Clínica de Olivos para someterse a modo de precaución de una arteriografía, una radiografía de los vasos sanguíneos de una zona determinada del organismo. La información generó controversia, ya que la especie se difundió temprano, pero luego fue negada por una integrante del equipo de comunicación del Gobierno nacional. Pasadas las 23, el mandatario nacional se retiró de la clínica.
Según las últimas informaciones, la internación de Macri fue recomendada por sus médicos luego de que sintiera un malestar cuando se disponía a asistir a un evento junto a su hija.
Al mandatario se le diagnosticó una arritmia (fibrilación auricular de alta respuesta) y está internado en la unidad coronaria estable.
El hecho ocurrió esta tarde, luego de un off the record que mantuvo en la Quinta de Olivos con los periodistas Edi Zunino, Eduardo Feinmann, Walter Curia y Gloria López Lecube, que finalizó a las 18.47.
Según confirmaron fuentes oficiales a Télam, el Presidente "ya terminó el estudio" realizado en esa clínica del partido de Vicente López y permanecía allí, aunque no se pudo confirmar el resultado del estudio ni cuándo Macri volvería a su residencia oficial.
Previamente, el periodista del periódico Diario Rio Negro, Walter Curia -quien compartió una reunión junto a otros colegas con Macri en Olivos- dijo a través de su cuenta oficial de Twitter que el Presidente "no transmitió ningún malestar" durante ese encuentro, sino que sólo se lo veía "cansado".
Curia consignó que el Presidente presentó molestias alrededor de las 15 y que el médico de la Unidad Presidencial consideró que se trataba de una "pequeña arritmia cardíaca" pero que le recomendó seguir con su actividad normal.